Cada vez hay más niños sufren la dermatitis atópica.
La dermatitis
atópica es una enfermedad genética que suele aparecer en niños cuyos padres u
herman@s que han experimentado enfermedades alérgicas como: asma, alergia alimentaria,
urticaria…
Los primeros signos aparecen a los 2-3 meses de vida. Aparecen
manchas rojizas, estas manchas pueden ser observadas en las mejillas y en el mentón,
en el tronco.
En algunas ocasiones aparece una pequeña grieta rojiza en el
pliegue del lóbulo de la oreja y esto puede ser un primer síntoma.
Más tarde se puede propagar a todo el cuerpo, brazos y
piernas. El niño se rasca permanentemente y especialmente cuando no esta
vestido. En ocasiones los picores pueden alterar el sueño. A menudo, de
rascarse el niño, puede provocarse arañazos y hasta hacerse sangre.
La dermatitis atópica tiene periodos en los que el niño está bien y periodos en los que les da el brote.
Aquí os dejo un cuadro donde podemos ver la evolución de la dermatitis según va creciendo el niño.
Algunos alimentos, las cremas, el jabón con el que les lavamos, el detergente con el que lavamos la ropa, las variaciones de temperatura... hacen que puedan agravar las lesiones cutáneas producidas por la dermatitis y que les pique más.
Algunos consejillos:
- Es recomendable que lleve ropa 100 % algodón y que no se lave con productos irritantes.
- Que utilice cremas y jabones recomendados por su pediatra que le reduzca la inflamación y el picor.
- Hacer una dieta terapéutica para eliminar aquellos alimentos que son culpables.
Los papás podéis estar tranquilos por que el 90% de los niños alcanzan una curación total.
