Cuenta la
leyenda, que cuando a un niño se le cae un diente lo tiene que colocar debajo de la
almohada cuando se vaya a dormir, y el Ratoncito Pérez, "el ratón de los
dientes", por la noche le cambia el diente por una moneda. Cuando yo era
niña, el Ratoncito Pérez me cambiaba los dientes por una moneda de 100
pesetas. Recuerdo la ilusión que me hacía despertarme al día siguiente y
mirar debajo de la almohada.
Y yo me pregunto: ¿Se seguirá manteniendo esta tradición?? ¿Seguirá el Ratoncito Perez dejando una moneda o ahora es más generoso?
Creo que ahora es más generoso... Un besazo.
ResponderEliminarDaba por echo que sería algo más generoso, que dejar una moneda como en nuetros tiempos
EliminarNo puedo hablar en nombre de toda la sociedad, pero mi nieto Alberto está ahora en pleno proceso y recibe dinero por cada diente, monedas que no sabe valorar por falta de práctica, pero que con mucha ilusión echa a su hucha y promete a sus pades regalos.
ResponderEliminarUn abrazo
Yo tambien lo guardaba en la hucha. Me alegra saber que todavia siguen la monedas y no unos pedazos de regalos. Besos
EliminarHolas Vane, tienes un premio en mi bloghttp://relatosfantasiaelfos.blogspot.com.es/2013/03/premio-de-elizabeth-urian-este-blog.html
ResponderEliminarsaludossss